Territorio

La Cantina se encuentra en el centro de un territorio generoso a pocos kilómetros de la Reggio Emilia, en una llanura triangular limitada por las aguas tanto del Crostolo como del Tresinaro y las suaves laderas de los Apeninos.

En este contexto geográfico, caracterizado por un clima favorable, el olivo crece espontáneo sobre la línea fronteriza entre la parte superior del monte y los viñedos, que se encuentran siempre en su posición ideal gracias a la buena exposición al sol y a la grava del terreno.

Aquí se han cultivado durante generaciones varios tipos de Lambrusco, símbolo indiscutible del territorio, pero también han encontrado casa, incluso, otras vides internacionales como, por ejemplo, la Cabernet Sauvignon, famosa uva de origen francés amante del ambiente de las colinas.

Las tierras de este rincón de Emilia, tan generosas y llenas de vida, proporcionan sabores y sugerencias que entran en los vinos como una ligera brisa que les dan un carácter inconfundible. Una huella única, así como único es el Lambrusco IGT.